Vista general de la ventilación mecánica artificial y dispositivos de ventilación de emergencia

La ventilación desempeña un papel imprescindible en el tratamiento de pacientes en situaciones de emergencia. En situaciones extremas puede mantener la función respiratoria y garantizar el suministro de oxígeno en caso de que el/la paciente no pueda respirar por sí mismo/a. En este caso, la ventilación mecánica artificial ofrece varias ventajas en comparación con la ventilación manual y puede salvar vidas.[1]

WEINMANN facilita la ventilación mecánica artificial en situaciones de emergencia con distintos dispositivos de ventilación de emergencia y durante el transporte.

Definición: ¿qué es la ventilación mecánica artificial?

La capacidad para la respiración espontánea es un proceso fisiológico autónomo que en una persona sana funciona de forma continuada sin un control consciente, especialmente al dormir. Sin embargo, bajo determinadas condiciones fisiopatológicas, como traumatismos o enfermedades graves, esta capacidad puede resultar menoscabada o perderse por completo. En consecuencia, es necesario recurrir a diversos métodos de ventilación para apoyar la función respiratoria.

En la ventilación manual, la ventilación se realiza a través de una bolsa de ventilación mediante una máscara para ventilación o un tubo.

La ventilación mecánica artificial, por el contrario, es un método en el que se utiliza un respirador para regular y apoyar la ventilación alveolar. De esta forma, se garantiza un volumen y una frecuencia respiratoria constantes. Mediante una presión positiva de las vías respiratorias se garantiza que el gas respiratorio se transporte a los pulmones. 

¿Por qué es difícil la ventilación manual?

La ventilación con bolsa/máscara es un método utilizado con frecuencia, ya que supuestamente es fácil de aplicar. Para ello se conecta una bolsa de ventilación, que suele estar ligada a una fuente de oxígeno, con una máscara facial. Esta se sujeta en la cara y cubre tanto la nariz como la boca. Al mismo tiempo se comprime la bolsa, y de esta forma el oxígeno fluye a través de las vías respiratorias del/de la paciente. Gracias a la válvula acoplada, el oxígeno no vuelve a la bolsa.

Solo en 3 de cada 106 casos se cumplieron todos los parámetros de ventilación relevantes para las directrices en la ventilación con bolsa/máscara durante la RCP. [2]

Lo fundamental para esta forma de proceder es que las vías respiratorias estén libres, disponer de una máscara lo suficientemente hermética y utilizar la técnica adecuada. En general, se necesitan dos ayudantes. En realidad, este método no es fácil de aplicar y, según varios estudios, incluso el personal de salvamento experimentado tiene dificultades con el mismo.[2]

Sobre todo, falta un método fiable para medir el volumen de ventilación o la presión que se ejerce sobre las vías respiratorias. La administración del oxígeno presionando la bolsa solo puede controlarse hasta cierto punto. Sin información en tiempo real existe un riesgo elevado de picos de presión peligrosos que pueden provocar daños en los pulmones.

Otro problema de la ventilación con bolsa/máscara puede ser la aplicación de intervalos de ventilación demasiado elevados con un número demasiado alto de impulsos de ventilación por minuto.[3] Esta hiperinsuflación puede tener consecuencias negativas en el estado de la circulación del/de la paciente.

Casos de aplicación de la ventilación mecánica en la medicina de emergencias

Ventilación mecánica

La ventilación mecánica se utiliza en distintos ámbitos de la medicina de emergencias. Se aplica, por ejemplo, cuando el/la paciente ha sido anestesiado/a en el lugar de la emergencia y ya no puede respirar por sí mismo/a. 

En situaciones de emergencia, como un paro cardiorrespiratorio, debe reanimarse al/a la paciente lo más rápido posible y garantizarse un suministro de oxígeno suficiente. Una ventilación mecánica artificial puede salvar vidas en la reanimación manteniendo el intercambio de gases en los pulmones hasta que el/la paciente pueda volver a respirar por sí mismo/a. 

La ventilación mecánica también es relevante para el transporte en la ambulancia o en el traslado del paciente. Garantiza un suministro de oxígeno constante y continuo durante el transporte, sin que los equipos de rescate tengan que abandonar su asiento para realizar la ventilación. Así, la ventilación mecánica artificial también contribuye a la seguridad del usuario.

Sin embargo, los dispositivos de ventilación no solo se utilizan en la ventilación invasiva; también puede favorecerse la ventilación no invasiva con distintos modos de ventilación, por ejemplo, en el tratamiento de un edema pulmonar cardiogénico mediante terapia CPAP.

Ventajas de los dispositivos de ventilación

Si se compara directamente con la ventilación con bolsa/máscara, la ventilación mecánica artificial presenta algunas ventajas. Los estudios indican una mayor efectividad en comparación con la ventilación manual.[4] Mientras que la ventilación con una bolsa de ventilación durante la reanimación provocó una hipoventilación masiva en un estudio, el dispositivo de ventilación consiguió garantizar una ventilación más efectiva.

Durante la reanimación, el uso de un dispositivo de ventilación mecánica en el modo IPPV está asociado con un mejor estado de ventilación que el uso de una bolsa de ventilación.

Los dispositivos de ventilación también aportan beneficios en relación con la gestión de recursos de la tripulación (CRM, por sus siglas en inglés). En general, para realizar una ventilación bolsa/máscara efectiva se necesitan dos profesionales de salvamento. Lo ideal es que una persona coloque la máscara en la cara del/de la paciente y la sujete mientras que la otra persona lleva a cabo la ventilación en sí. Sin embargo, de esta forma, los/las dos profesionales de salvamento están limitados/as a realizar una tarea concreta y no pueden llevar a cabo ninguna otra.

Si se dispone de un dispositivo de ventilación, los equipos de rescate pueden realizar más tareas, documentarlas de forma más completa y tratar mejor al/a la paciente.

En cambio, los dispositivos de ventilación presentan la ventaja de que los/las profesionales de salvamento disponen de una mayor capacidad para realizar otras tareas y para la documentación de la intervención. Como consecuencia, puede obtenerse un tratamiento mejor y más efectivo del/de la paciente.[5] Esto reduce el esfuerzo manual y permite al personal médico concentrarse en el tratamiento del motivo de la emergencia. 

A simple vista, el equipamiento para la ventilación con bolsa/máscara parece ser más manejable y menos pesado, pero los dispositivos de ventilación también pueden ser ligeros y portátiles. Además, son fáciles de manejar y su funcionalidad no depende tanto de la precisión de la técnica del/de la profesional de salvamento como suele ser en el caso de la ventilación bolsa/máscara.

Dispositivo de ventilación de WEINMANN

Ventilación mecánica

Los dispositivos de ventilación de WEINMANN están diseñados especialmente para su uso en situaciones de emergencia y son adecuados tanto para su aplicación al aire libre como en el transporte de pacientes. Ofrecen la posibilidad de realizar una ventilación invasiva y no invasiva y facilitan la reanimación cardiopulmonar según las directrices mediante el modo RCP o el modo CCSV.

Los monitores integrados permiten controlar los parámetros de ventilación y avisan en caso de desviaciones mediante señales ópticas y acústicas. De esta forma, pueden evitarse de manera efectiva tanto la hipoventilación como la hiperventilación, ya que hay disponibles funciones precisas de ajuste y de control.

MEDUMAT Standard² 

Dispositivo de ventilación de emergencia y durante el transporte

MEDUMAT Standard² dispone de un monitor en color que representa de forma clara y sin demora todos los parámetros de respiración fundamentales. Mediante el innovador modo de ventilación CCSV se amplía un modo específico para la reanimación (RCP) que maximiza la eficiencia y la seguridad en situaciones críticas. Para los/las anestesistas, la administración del anestésico se vuelve más fácil gracias al modo RSI. La ventilación no invasiva también es posible con MEDUMAT Standard².

Con un peso reducido de tan solo 2,5 kg y una duración de la batería de hasta 10 horas, MEDUMAT Standard² es perfecto para situaciones de emergencia. 

MEDUVENT Standard 

Dispositivo de ventilación de emergencia accionado por turbina

MEDUVENT Standard ha sido desarrollado especialmente para intervenciones de emergencia y ofrece una ventilación sin necesidad de gas comprimido con entre un 21 % y un 100 % de oxígeno gracias a la turbina integrada. El dispositivo de ventilación es compatible con la ventilación no invasiva y permite la ventilación manual mediante el MEDUtrigger, que sustituye la ventilación con bolsa/máscara. 

Con un peso de tan solo 2,1 kg y un volumen de 3,5 l, MEDUVENT Standard se incluye entre los dispositivos de ventilación de emergencia y durante el transporte más pequeños y ligeros de su categoría. Características de seguridad adicionales como el sistema de alarma integrado notifican al personal médico en situaciones críticas. 

Si desea obtener más información o un asesoramiento personalizado, póngase en contacto con nosotros y le atenderemos encantados.

[1] Idris Ahamed H. (2023) Bag-Valve-Mask Ventilation and Survival from Out-of-Hospital Cardiac Arrest: A Multicenter Study.

[2] Neth M et al (2020): Ventilation in Simulated Out-of-Hospital Cardiac Arrest Resuscitation Rarely Meets Guidelines

[3] Aufderheide TP, Sigurdsson G, Pirrallo, RG, Yannopoulos D, McKnite S, Von Briesen C, Sparks CW, Conrad CJ, Provo TA, Lurie KG. Hyperventilation-induced hypotension during cardiopulmonary resuscitation. Circulation. 2004;109(16):1960-1965.

[4] Hernández-Tejedor A. (2023): Ventilatory improvement with mechanical ventilator versus bag in non-traumatic out-of-hospital cardiac arrest: SYMEVECA study, phase 1; Chauhan A. et al (2023): Comparison of hemodynamic consequences of hand ventilation versus machine ventilation for transportation of post-operative pediatric cardiac patients

[5] Automatic transport ventilator versus bag valve in the EMS setting: a prospective, randomized trial